El Gobierno de la Junta elimina en la práctica el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, rebaja el IRPF e impulsa beneficios para familias numerosas, empresas y autónomos

 

Aprueba las primeras medidas de una ‘revolución fiscal’, que dinamizará la economía y acabará con la discriminación fiscal de los andaluces

 

El Gobierno de la Junta de Andalucía ha puesto ya en marcha su anunciada bajada de impuestos, cuya finalidad no es otra que reducir la presión fiscal que sufren los andaluces.

El objetivo de esta bajada de impuestos es doble: por una parte, acabar con la discriminación que sufren los andaluces al tener que hacer frente a una mayor presión y esfuerzo fiscal que los residentes en otras comunidades autónomas de España.

Y, por otro lado, dinamizar la economía, dotando a las familias y los emprendedores de una mayor liquidez, lo que se traducirá en un mayor consumo y una mayor inversión y, en consecuencia, creación de empleo.

             

IMPUESTO SOBRE SUCESIONES Y DONACIONES

El nuevo Gobierno andaluz ha eliminado en la práctica este martes el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones para cónyuges y familiares directos. Para ello, ha aprobado por decreto una bonificación al 99% en la cuota del impuesto para los grupos de parentesco I y II.

De este modo, el Gobierno de la Junta de Andalucía usa las competencias fiscales autonómicas y la vía de urgencia para impulsar la actividad económica y la creación de empleo, atendiendo a la demanda social existente, y dando cumplimiento al acuerdo de gobierno entre PP y Cs.

Mediante esta bonificación fiscal, Andalucía se sitúa entre las Comunidades Autónomas con la fiscalidad más baja en este impuesto, permitiendo:

  • Acabar con el agravio comparativo respecto a las familias residentes en otras comunidades autónomas. Los gobiernos anteriores impusieron en Andalucía una tributación 100 veces mayor.
  • Aumentar la renta disponible de las familias para el consumo e inversión.
  • Atraer inversión y talento: se dejará penalizar el ahorro familiar en nuestra tierra.
  • Dinamizar la economía al facilitar la anticipación en el tiempo de la transmisión de bienes y derechos de padres a hijos y demás descendientes.
  • Mejorar la eficacia y eficiencia de los recursos tributarios al evitar la pérdida permanente de recursos en otras figuras como el IRPF, el IVA o Transmisiones Patrimoniales por el éxodo fiscal de personas físicas hacia otras comunidades con tributación más beneficiosa.
  • Reducir la indeseable economía sumergida y el fraude fiscal.

 

En cuanto a las sucesiones, los andaluces disfrutarán de una situación similar a la de los canarios, cántabros, extremeños, madrileños, murcianos, y riojanos. Las comunidades autónomas vecinas de Extremadura y Murcia ya tienen regulada una bonificación al 99% y Castilla-La Mancha, entre el 99% y el 80%.

En cuanto a las donaciones, Andalucía pasará de ser una de las comunidades con mayor gravamen en las donaciones, al grupo de comunidades con menor coste fiscal, al nivel de los canarios, cántabros, madrileños, murcianos y riojanos.

Para ilustrar de un modo gráfico el impacto real de esta medida, se puede recurrir al siguiente ejemplo, muy común sobre todo en la Andalucía rural:

Unos padres deciden ayudar a un hijo con una donación. En función de la cuantía o el valor de ese bien, la situación anterior y actual sería:

  • Si la donación es de (o está valorada en) 000 €, hasta ahora habría que pagar 782,06 € y, a partir de ahora, sólo 7,82 €.
  • Si la donación es de (o está valorada en) 000 €, hasta ahora habría que pagar 2.652,48 € y, a partir de ahora, sólo 26,52 €.
  • Si la donación es de (o está valorada en) 000 €, hasta ahora habría que pagar 6.258,48 € y, a partir de ahora, sólo 62,58 €.
  • Si la donación es de (o está valorada en) 000 €, hasta ahora habría que pagar 12.415,35 € y, a partir de ahora, sólo 124,15 €.

El impacto económico de esta medida para 2019 apenas es de 14,7 millones de €, 14 veces menos de lo que se pagará en 2019 por sentencias judiciales.

El anterior Gobierno solía sostener que con este impuesto se hace “justicia distributiva”, pero en 2018 toda la recaudación por este impuesto en Andalucía (299,3 millones de €) se dedicó a cubrir una parte de los 324,2 millones de € que se pagaron en sentencias judiciales por errores de gestión de las consejerías.

La voluntad del nuevo Gobierno al adoptar esta medida es proteger al máximo el núcleo familiar directo, de ahí que su incidencia se centre en los cónyuges y parientes directos, y hacerlo, además, una vez estudiado el impacto económico de la misma y su repercusión sobre el presupuesto de ingresos.

La medida afecta a toda la población andaluza, ya que beneficia a toda aquella persona que quiera hacer una donación a su cónyuge o hijos.

           

IRPF

La reforma que va a impulsar el Gobierno del cambio colocará a Andalucía entre las comunidades autónomas con el IRPF más bajo (sólo por detrás de Madrid y Castilla y León, y sólo en algunos tramos de renta).

En cuatro años, el tipo máximo bajará 3 puntos: De forma progresiva, se reducirá el gravamen en todos los tramos.

  • El primer tramo de renta pasará del 10% al 9,5%.
  • Se unifican los tramos entre 20.200 y 28.000 € (que tributa al 15%) y entre

28.000 y 35.000 € (que tributa al 16,5%), en uno solo. Así, entre 20.200 y

35.200 € se tributará al 15%.

  • Los tramos comprendidos entre 35.200 y 60.000 € se integran, pasando de tributar del 19% al 18,5%.
  • El tramo a partir de 60.000 € pasará del 23,5% al 22,5%. Es el último tramo (se elimina el tramo para rentas a partir de 120.000 €). El tipo impositivo máximo, por tanto, pasará del 25,5% al 22,5%.

El Gobierno socialista impuso una escala autonómica de 8 tramos con tipos de entre el 10% y el 25,5%. El Gobierno del cambio reducirá la escala autonómica hasta igualarla a la escala estatal.  

La medida contribuye a retener en Andalucía a los contribuyentes que más recursos aportan a la financiación de las políticas públicas y que más actividad y empleo generan.

Esta bajada del IRPF hará que aumente la liquidez de los ciudadanos, lo que favorecerá un mayor consumo e inversión, así como la creación de empleo, mejora la remuneración de los asalariados, atrae el talento y evita la deslocalización de éste por cuestiones fiscales.

Todo ello contribuye a un aumento de la recaudación por el IRPF a medio plazo.

La bajada del IRPF se llevará a cabo, de forma progresiva, mediante una disposición transitoria, a lo largo de los ejercicios 2019 a 2023, cuando será plenamente efectiva.

El primer tramo de la tarifa (las rentas más bajas) empezará a reducirse para el ejercicio 2019 y alcanzará su tributación definitiva en 2020.

Ejemplo:

✓ Tributación en Andalucía de una renta bruta anual de 45.000 € (contribuyente soltero, sin hijos, menor de 65 años):

  • Año 2018: 4.917,08 €
  • Año 2023: 4.749,86 €

 

Los trabajadores, pensionistas y autónomos notarán esta bajada del IRPF desde este jueves 11 de abril, cuando entra en vigor del decreto.

Sin embargo, esta bajada del impuesto no tendrá impacto presupuestario en la recaudación en Andalucía hasta 2021, cuando se produzca la liquidación definitiva con el Estado por las entregas a cuenta del tramo autonómico del IRPF correspondiente a este ejercicio 2019.

A partir de 2023, cuando se complete la reforma del IRPF que se aplicará de manera progresiva, la Junta devolverá a los trabajadores, pensionistas y autónomos andaluces 149 millones de euros anuales.

           

FAMILIAS NUMEROSAS

Se establece un tipo reducido para los impuestos de TPO (Transmisiones Patrimoniales Onerosas) y AJD (Actos Jurídicos Documentados) para las familias numerosas en la compra de su vivienda habitual, siempre que ésta no supere el valor de 180.000 €.  

  • El tipo aplicable en las TPO pasa del 8% al 3,5%.
  • El tipo aplicable en los AJD (escritura) pasa del 1,5% al 0,1%.
  • Ambos impuestos son incompatibles: se paga TPO si la vivienda es de segunda mano o AJD+IVA si se trata de una vivienda nueva.

Ejemplo:

Adquisición de una vivienda de 180.000 €:

  • Hasta ahora, la familia debe pagar: 14.400 € por TPO o 2.700 por AJD, ya que ambos impuestos son incompatibles.
  • En adelante pagará: 6.300 € o 180 por AJD.
  • El ahorro sería de 8.100 € en el caso de TPO y de 2.520 en AJD.

De esta medida se podrán beneficiar las más de 130.000 familias numerosas que existen en Andalucía.

Este beneficio para las familias numerosas ya está regulado de forma similar en otras comunidades autónomas como Galicia, Cantabria, La Rioja, Murcia, Comunidad Valenciana, Aragón, Canarias, Extremadura, Castilla y León o Madrid.

Es otra medida más que persigue el objetivo del Gobierno andaluz de mejorar el respaldo económico y los incentivos dirigidos a las familias y la natalidad.

El impacto en la recaudación de la Junta será de 3 millones de € en 2019.

EMPRESAS Y AUTÓNOMOS

Las empresas pueden optar a la hora de tributar la compra de inmuebles por hacerlo a través del IVA o bien, acogiéndose a la exención del IVA prevista por la ley, a través del Impuesto del ITP.

El Gobierno andaluz socialista estableció en 2003 un tipo del 2% para las empresas y autónomos que decidieran tributar a través del IVA la adquisición de los inmuebles, lo que castigaba a las empresas que optaran por esta opción.

El Gobierno del cambio reduce del 2% al 1,5% el tipo aplicado en el impuesto de AJD a las empresas y autónomos que adquieran inmuebles con renuncia a la exención del IVA:

  • Se rebaja el tipo hasta el nivel de comunidades como Madrid, Asturias o La Rioja.
  • La medida contribuye a que las empresas dispongan de mayor liquidez y ello, a su vez, permite impulsar y dinamizar la actividad económica.

 

Ejemplo:

  • Por la compra de un local comercial de 300.000 €, el empresario tributaría en concepto de AJD:
    • Antes de la reforma (2%): 6.000 €

Tras la reforma (1,5%): 4.500 €, lo que supone un ahorro de 1.500 €.